Un cofre de la antigua Toscana: la calidez de la madera y el cuidado de los detalles para un refinado complemento de decoración. La cartela, pintada a mano por decoradores de Sansepolcro, hace referencia al uso por parte de los apotecarios como contenedor para el transporte y la conservación de objetos preciosos, como ungüentos, aceites esenciales y cremas.
La obra ha sido realizada por maestros artesanos toscanos y es la copia fiel en la forma y decoración del original encontrado en el monasterio de la Verna.
El proyecto de Aboca, destinado a explorar el profundo vínculo entre el hombre y la naturaleza, incluye la recuperación y la reanudación de técnicas artesanales antiguas y sabias. Por esta razón, la producción de los objetos se confía a los trabajadores expertos, capaces de renovar la tradición secular que ha contribuido a difundir el nombre de Italia en el mundo.
Notas
La madera de castaño utilizada para el cofre fue trabajada según antiguas técnicas renacentistas que realzan el perfume y el color. El acabado es de goma laca tirada a mano y los materiales utilizados, como anilinas y cera de abejas, son exclusivamente naturales.
Un cofre de la antigua Toscana: la calidez de la madera y el cuidado de los detalles para un refinado complemento de decoración. La cartela, pintada a mano por decoradores de Sansepolcro, hace referencia al uso por parte de los apotecarios como contenedor para el transporte y la conservación de objetos preciosos, como ungüentos, aceites esenciales y cremas.
La obra ha sido realizada por maestros artesanos toscanos y es la copia fiel en la forma y decoración del original encontrado en el monasterio de la Verna.
El proyecto de Aboca, destinado a explorar el profundo vínculo entre el hombre y la naturaleza, incluye la recuperación y la reanudación de técnicas artesanales antiguas y sabias. Por esta razón, la producción de los objetos se confía a los trabajadores expertos, capaces de renovar la tradición secular que ha contribuido a difundir el nombre de Italia en el mundo.
Notas
La madera de castaño utilizada para el cofre fue trabajada según antiguas técnicas renacentistas que realzan el perfume y el color. El acabado es de goma laca tirada a mano y los materiales utilizados, como anilinas y cera de abejas, son exclusivamente naturales.